Desde que descubrí las cajas de serpentinas de Fabi decidí
que yo también quería probar. Encontré un tutorial en la red y, durante un
tiempo, me paseé por las tiendas del “todo a cien”, como se llamaban antiguamente,
para avituallarme de serpentinas y estar preparada para la ocasión. Oye y si al
final no hago nada con ellas siempre estoy preparada para las fiestas, pensaba
yo. Je, je, je. Lo difícil era encontrar colores un poco chulos. Bueno, difícil
no. ¡Imposible! Yo alucinaba con los colores de las cajas de Fabi y, el día que
hice el curso de arcilla polimérica con ella, descubrí su “secreto”. Me dijo que
las pintaba con pintura acrílica y como en mi casa hay de todo, también
pinturas, era el momento de sacar los bártulos y hacer algo. Sólo faltaba
encontrar la receptora del regalo y esa fue Marta, una amiga de esas que se lo
merecen todo porque, entre otras muchas virtudes, es de las que le gusta ver
todo lo que hacgo. Para ella fue el regalito.
De Fabi también cogí la idea del agarrador de arcilla pero
nunca la alumna puede superar a su maestra así que, aunque es una caja decente,
deja alguna cosas que desear respecto a las que Fabi hace.
¡¡¡Hasta pronto!!!
4 comentarios:
¡¡¡¡¡¡CCCCCCCCCCCCCCCCCCCoooooooooooooooooómo moooooooooooooooooooooooola!!!!!
Mónica, qué maravilla!!! es impresionante en lo que se pueden convertir las serpentinas....me parece super original y bonito. Un besote cielo
Ualaaaaaaa!!!! Quina monada per favorrrrr..... Havia vist caixetes fetes amb serpentines, però no com aquesta!!! Genial Mónica ;)))) Besitos mil!!!
Hola Mónica, haces unas cosas maravillosas, por eso le he dado a tu blog un premio Liebster Award. Puedes verlo en http://trespcrochet.blogspot.com.es/
besos
Puri
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